LO MEJOR DEL VIAJE: PIPPILOTI RIST

En mi visita a la Fundación Miró, ya casi de salida, se me ocurrió pispear una entrada lateral donde se mostraba la expo de PIPPILOTI RIST, una artista suiza que hace video instalaciones de una estilización y una calidad impresionante.

Las únicas cosas que puedo decir para expresar mi admiración por esta mujes son tres: 1) busquenla en la web 2) me parece una de las mejores artistas de nuestro tiempo, y no soy la única que así l piensa 3) mi aspiración es moverme bien para traerla a la Argentina.

Tiene un manejo de la arquitectura, las texturas, la luz, la estilización y la alegría que jamás había encontrado en ningún otro género.

Antes de dejar el edificio le posteé un mensaje a Pippiloti:

"Thanks to the delicacy, subtlety and power of your art, I´m leaving Barcelona a much happier woman....
I dream of bringing you to Argentina one day"

Jueves 7 de octubre - todo sobre Miró

Me iba ese día de Barcelona, a las 17 hs. A la mañana me fui a conocer Montjuic. Ya me había perdido las fuentes, pero nada me haría faltar a la Fundación Joan Miró.

Quedé feliz con todo lo que vi. No sólo la obra de Miró sino también la obra de su Fundación, la elección de los artistas que promueve, el edificio, la luz...

El edificio estuvo a cargo de un discípulo de Le Corbusier, el amigo de Miró, llamado Josep Lluís Sert, y se inauguró en 1975.
Está hermosamente integrado al paisaje. Como buen ejemplo del modernismo racionalista catalán, el aprovechamiento de la luz del sol era total.
Por momentos me hacía acordar al racionalismo de mi pequeño departamento en Buenos Aires. Becker-Ferrari, la constructora, tiene una tendencia a racionalizar sus obras.

Bueno, volviendo a Miró. Era integrante del CAT PAC ("paquete" de artistas catalanes modernos). Ya desde el Reina Sofía venía siguiendo su casi obsesión por borrar todo lo que hace de sus pinturas una pintura simple y a secas.

Aspiraba a que sus obras se convirtiesen en notas, en palabras, números, puntos y gestos de color. Frecuenta poetas porque decía que había que ir "siempre más allá"
Aún así, desiste de unirse a grupos surrealistas como el de Breton, sosteniendo que él era "tan solo un pintor".

Amo esta contradicción y esta lucha en los artistas.

Fue el mentor del futurismo, y del cubismo. Tal vez su ruralismo no lo acercaba tanto a sus contemporáneos futuristas, deseosos de líneas, diagonales y referencias a máquinas y a lo urbano, como al cubismo, más atravesado por números y escritos.

Tal vez más dibujo que pintura.

No subo fotos de sus pinturas porque no pude afanarle ningún momento al "NO PICTURES" de la Fundación.

LAS RELAJADAS VIDAS DE GEORGE & GILBERT

"They weren´t good artists. They weren´t bad artist. But, my God, they were artists"

Estos dos fotógrafos, asiduos expositores en la galería de los Fischer, eran dos ingleses que tenían un modo muy saludable de vivir y disfrutar del arte.

Aquí su manifiesto. Con ellos se quedó vagando por un buen rato mi espíritu de búsqueda y aprendizaje. Disfruté mucho de esos archivos esa tarde en el Museo Contemporáneo de Barcelona.

Con Beatriz Sarlo, M.de Arte Contemporáneo de BCN










Miércoles 6 de octubre - Dalí

"Que mi obra sea como un poema musicalizado por un pintor"

Me tomé un tren a Figueres, con dos de mis roomates, para encontrarme con el Teatro Museo de Dalí.
El pibe armó su museo en plena vida artística, y disfrutó de madurarlo y dejarlo tal como a él le gustaba. Fue testigo de "las largas colas de visitantes", cosa que disfrutaba muchísimo ver.

No lo disfruté yo como a él le hubiese gustado. Era demasiado compacto, demasiado armado, con poco vuelo. El edificio no lo favorecía, a mi parecer.

Donde debería haber ido es a Cadaques, un pueblito de pescadores donde se crió Dalí y donde años más tarde levantó su Casa Museo, residencia donde vivió Dalí con Gala durante muchísimos años.
En Cadaques veraneó con Lorca y también jugueteó con Lorca. Allí fue el embrión de lo que después, junto con Buñuel, sería el trío artístico más notable de la primera vanguardia española del siglo XX.

Por esos días también visité el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona.

Se exponía "Con la probabilidad de ser visto, archivos de una actitud", una colección de espacios, objetos y muestras de escultura y arte conceptual de Dorothee y Konrad Fischer.
Los Fischer fueron una pareja de jóvenes que en el ´67 hizo de Dusserldorf un espacio para el inicipiente arte contemporáneo local.
Una mini- Factory warholiana en Alemania.

Recrearon la galería con la que arrancaron, y continuaron por mucho tiempo, que no medía más de 6 x 3. En la foto estoy sentada en ese espacio.
También se mostraban sus primeros intentos de acercar el arte al público de una manera diferente - y muy contaria a la actitud que tomaban guías y guardias actuales de ese y cualquier museo: "eso no se toca".

Me divertía no saber dónde pararme: si del lado de la propuesta y el espíritu de los curadores originales de la exposición o en la de las autoridades actuales. Todo el asunto parecía un reloj de arena invertido: cincuenta años después, se imponía la distancia del museo - academia.. del ver, contemplar y admirar algo lejano e inasequible.

Me crucé con Beatriz Sarlo (foto). Me hubiese gustado hablar con ella de este fenómeno, y estuve tentada de reportear a los Fischer, o sus representantes, que estaban en Barcelona para la muestra.

No hice ninguna de las dos cosas. Me dije a mí misma que mejor era seguir viaje. La verdad es que estuve boluda y un poco cobarde al no hacer ninguna de estas dos cosas.

Sagrada Familia

El interior de esta iglesia me gustó como casi ninguna otra cosa de Antoni Gaudí. El tipo eligió tres tipos de piedra para armar las altísimas columnas que sirven de soporte a toda la estructura. Cada una, según su resistencia, cumple una función: las de granito aportan menos peso, las rojas, de pórfido, usadas para más peso, y por último las gris oscuro, de basalto, las más fuertes.

Al igual que para la casa Batlló, no usó planos, sino una maqueta polifunicular con bolsitas de perdigones colgando para calcular el peso sin tener que hacer complicadas operaciones matemáticas.

Lo más impresionante de la Sagrada Familia es la vigencia de la construcción. Una obra que sigue en construcción enriquece mucho la visita y la participación de quienes la van a ver. Cada día es una obra diferente. Lo es cada hora, y cada minuto también.

Una frase de Gaudí me gustó mucho: " Todo el mundo encuentra sus cosas en este templo: los granjeros ven las gallinas, los científicos ven los signos del zodíaco y los teólogos, la genealogía de Jesús".

5 de Octubre - Gaudí: Casa Batlló

Blanqueada mi sensación de rechazo hacia la obra de este genial artista por cuestiones más viscerales que emocionales o cognitivas, me propongo destacar las maravillas de la Casa Batlló.
Esta residencia construída por encargo de los Batlló a fines del diecinueve y principios del veinte es una mezcla de osario (su fachada se sostiene por columnas que parecen huesos), dragón (en su azotea tanto las piedras como las chimeneas como las redondeces emulan la fisonomía y atributos de este animal, y ballena (pasear por el último piso se parece a haber sido tragado por una)

La carpintería es casi siempre redondeada, y hecha por Antoni, pieza por pieza. Las paredes son de roble barnizado moldeado a su antojo.
La luz se obtiene con unos artilugios más propios de un artista que de un arquitecto. Luz cenital a a través de unas aberturas logradas con tablas de madera colocadas debajo de las ventanas que dan al patio interior. O bien usando cerámicas claras para revistir las paredes del edificio en los pisos inferiores, y más oscuras a medida que se gana altura.

Un cielo raso helicoidal connota un remolino de agua y las columnas de estuco al fuego dejan una sensación de naturaleza, selva y vegetales muy bien lograda.

Mi humilde pregunta ante esta sensación de saciedad que da estar en un lugar tan cuidado en absolutamente cada detalle era: qué hacían con los muebles no gaudianos? No puedo imaginarme esa estética albergando un sillón o una silla no diseñada por él.
Había una foto de la casa terminada y mi sensación fue que es un lugar más para ser admirado que vivido.

Parque Guell

Construido por Gaudí por encargo de su mecenas: Antoni Guell.

No fue lo que él quiso.

Modestísima opinión de quien lo caminó: it was not meant to be.